REQUIEM MOMENTANEO

La muerte visitó mi morada con su manto de sueño frio y eterno. No sé el porqué de su visita, ni a que vino; no me llevó a mi, a ningún conocido, sólo tomó mi hasta entonces mal gastado tiempo y se hizo cargo de él y de su libertad. No he estado escribiendo nada porque andaba en Cruzada exhaustiva tras la muerte para que me regrese lo que es mío. Estuve cerca. Pude sentirlo. Pero la seguiré correteando, aunque vaya con ella al ojo del huracán. Me enfrentaré a ella, lo recuperaré y compensaré todo aquello que he dejado vacío.

0 Comments:

Post a Comment